Al explorar nuevas perspectivas, encontramos inspiración a nuestro alrededor.
Ese es el espíritu detrás de Assignment: Inspiration, una sociedad entre National Geographic y Mazda que desafió a fotógrafos a captar momentos extraordinarios que tuvieran un impacto duradero. Y así, gracias a la creencia compartida de las dos marcas en el potencial de los seres humanos para inspirarnos a ver el mundo de una manera distinta, nació Assignment: Inspiration.
DESCUBRE LA HISTORIA DETRÁS DE ASSIGNMENT: INSPIRATION
Para Assignment: Inspiration, se seleccionó a tres fotógrafos de participantes de Instagram, que fueron invitados a California, donde los esperaba una serie de desafíos de fotografía en el lugar.
Bajo la mentoría de expertos de National Geographic y Mazda, tres encargos o misiones de narración visual llevaron a los fotógrafos a lugares hermosos por el sur de California. Cada fotógrafo buscó captar historias y, en definitiva, una oportunidad de convertirse en el próximo gran narrador de National Geographic.
Las misiones se basaron en la visita del fotógrafo David Guttenfelder, donde está la sede central de Hiroshima, Japón. Durante sus viajes, él fotografió la cultura a partir de la que nació Mazda, que sigue siendo una fuente de inspiración y de dedicación a la artesanía. Las tres misiones se diseñaron sobre la base de lo que aprendió.
La primera misión envió a los finalistas Nina Mayer Ritchie, Beth Mancuso y Sam Tippetts en busca del espíritu de Takumi. En Japón, un Takumi es un maestro artesano, un artesano que dedica su vida a dominar su destreza.
La segunda misión envió a los finalistas en busca de reflexiones únicas. Con la inspiración de la idea de que una reflexión es un momento en el que vemos el mundo de una manera distinta y en el que se altera nuestra percepción, se solicitó a los fotógrafos que captaran cómo se refleja el mundo alrededor de una superficie latente que cobra vida.
Para la tercera y última misión, se envió a los fotógrafos en busca de un vínculo humano creado a través de un descubrimiento compartido. Nina, Beth y Sam optaron por enfoques singulares y personales para encontrar momentos de seres humanos inspirados.
Se obtuvieron fotos espectaculares y se narraron historias cautivantes, pero, en última instancia, solo uno de los finalistas recibió las llaves de un Mazda nuevo y fue enviado hacia un nuevo camino con National Geographic como su próximo gran narrador.
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